Desde Chingaza, Petro plantea medidas para proteger las fuentes hídricas de Bogotá

El mandatario enfatizó en la protección de fuentes hídricas y la necesidad de frenar la expansión urbana. El proyecto PTAR Canoas y el parque Chingaza fueron puntos clave de su intervención.

Desde el parque natural Chingaza, el presidente Gustavo Petro lanzó un fuerte llamado de atención sobre la crisis hídrica que enfrenta Bogotá. Rechazando el racionamiento como solución, el mandatario propuso priorizar la preservación de los recursos naturales, detener la expansión urbanística y trabajar en la descontaminación del río Bogotá.

“Hoy tenemos un problema gravísimo cuya solución no es racionar el agua, sino aumentarla”, declaró Petro desde el embalse de Chuza, una de las principales fuentes del suministro hídrico de la capital. En este sentido, destacó la importancia de proyectos como la PTAR Canoas, un ambicioso plan para descontaminar el río Bogotá que lleva más de 20 años estancado por trámites administrativos y falta de apoyo financiero del Ministerio de Hacienda.

Proyectos clave para salvar el agua de Bogotá

Durante su intervención, Petro mencionó dos aspectos fundamentales: detener el crecimiento urbanístico descontrolado y fortalecer la protección de ecosistemas como el parque natural Chingaza y el río Bogotá.

El mandatario subrayó que proyectos como Lagos de Torca, que implica la urbanización de áreas sensibles como la reserva Thomas van der Hammen, deben ser replanteados para evitar impactos irreversibles en el medioambiente. Por su parte, sobre el río Bogotá, hizo énfasis en que la minería ilegal y la contaminación son los principales enemigos que deben ser combatidos con urgencia.

“Proteger nuestras fuentes de agua no es solo una prioridad local, sino una responsabilidad nacional”, señaló Petro al anunciar la intención de aumentar el presupuesto para la conservación de parques naturales y ecosistemas críticos.

La PTAR Canoas, clave para la recuperación del río Bogotá, sigue enfrentando obstáculos debido a la falta de aprobación de un documento del Ministerio de Hacienda, necesario para garantizar su financiación. La obra, valorada en cerca de $6 billones, podría transformar la calidad del agua en la capital y Cundinamarca.

Petro concluyó su discurso con un llamado a la cooperación entre la Nación, el Distrito y las autoridades ambientales para trabajar en soluciones sostenibles que permitan enfrentar la crisis hídrica y mitigar los efectos del cambio climático.