“Colombia se respeta”: Petro rechaza aviones militares y pide protocolo de deportación

El presidente Gustavo Petro reiteró que Colombia no permitirá deportaciones sin dignidad. Rechazó la llegada de aviones militares estadounidenses con migrantes irregulares y pidió establecer un protocolo que garantice el respeto por los derechos humanos.

“Un migrante no es un delincuente”: Petro envía mensaje a EE. UU.

A través de su cuenta de X (antes Twitter), el presidente Gustavo Petro dejó clara su posición frente a las recientes políticas migratorias del presidente estadounidense, Donald Trump. Petro aseguró que Colombia no aceptará deportaciones que vulneren la dignidad de las personas.

“Un migrante no es un delincuente y debe ser tratado con la dignidad que un ser humano merece. Por eso hice devolver los aviones militares estadounidenses que venían con migrantes colombianos”, afirmó el mandatario, quien también recalcó que las deportaciones solo serán aceptadas si se realizan en aviones civiles.

Petro pidió un protocolo claro y respetuoso para recibir a los colombianos deportados desde Estados Unidos. “No puedo hacer que los migrantes queden en un país que no los quiere, pero si ese país los devuelve debe ser con dignidad y respeto”, escribió el mandatario.

El llamado llega en medio de las nuevas medidas migratorias de Trump, quien endureció las políticas de deportación con acciones como la reinstauración del programa “Permanecer en México” y la suspensión de la política de “captura y liberación”.

Casos de maltrato en deportaciones: denuncias desde Brasil

Colombia no es el único país que ha reaccionado a las deportaciones masivas. Brasil también alzó su voz contra el trato recibido por sus ciudadanos. Según reportes, migrantes brasileños fueron devueltos en condiciones indignas: amarrados de pies y manos, sin acceso a agua ni baños durante los vuelos.

“Hacía demasiado calor, algunas personas se desmayaron”, denunció Edgar Da Silva Moura, uno de los deportados. Estas quejas refuerzan el llamado de Petro y otros líderes latinoamericanos para garantizar el respeto a los derechos humanos en los procesos de deportación.